viernes, 30 de marzo de 2012

Viva Portugal

Cuando uno está a 10.000 kilómetros de su casa, de su tierra, su familia y sus amigos, cualquier cosita, por pequeña que sea, que te recuerde a tu gente y a tus costumbres se convierte en motivo de alegría.

Hace unos días probamos por primera vez el Sweet Portuguese Bread, que es como un bollo dulce y esponjoso y que hemos descubierto que es perfecto para mojar en el café. Lo que viene siendo muy importante en un país en el que nadie moja nada en el café y en el que te miran raro en el Starbucks si abres la tapa de tu vaso de plástico y te pones a mojarte el cruasán.

Pues bien, al primer bocado de este pan, cual magdalena de Proust, me vinieron a la mente recuerdos de la niñez: el Panet de Sant Blai que nos comíamos a principios de febrero con el Lingotín, la Mona de Pascua, con su huevo y su "bollet de xocolate", el rollo que mojábamos en chocolate a la taza en Semana Santa...

Pero como todo lo bueno el pan portugués se acabó. Así que no me quedó más remedio que enfrascarme en la búsqueda de la panadería portuguesa que me habían dicho había en Hanford... Tras preguntar a un par de personas... ¡bingo!... panadería localizada. Y mirad qué he encontrado...




¡Mona de pascua! O como reza .la pegatina "Easter bread".  No podía imaginarme que los portugueses tuvieran la misma costumbre que tenemos en Valencia... es más, ¡incluso han puesto huevos cocidos en la mona!


En fin, que no puedo esperar a abrirla y darle un bocado a ver si sabe igual que las de casa.. jejjeje...

Por cierto, otro hallazgo en la panadería portuguesa y que ni se me había pasado por la cabeza que pudiera ser algo típico en Portugal... ¡Altramuces!




Conclusión: ¡Viva Portugal!

2 comentarios:

  1. Veredicto? sabor potable?.
    David

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  2. Pues estaba buena... Le faltaba un puntito pero estaba bastante lograda... Quién nos iba a decir que nuestros vecinos portugueses iban a alegrarnos las Pascuas... ejejej...

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